Hoy en día son muchas las industrias que tienen, como proveedores de un mismo producto, una amplia lista de la cual elegir. Con productos en apariencia similares generalmente se toma la decisión basándose en el común denominador: el valor del producto y su incidencia en el costo final para la empresa.
Sin embargo, en el rubro de contenedores plásticos no siempre el costo garantiza una compra exitosa y ganancia a futuro, ya que el precio no necesariamente indica la calidad del producto y, más aún su ventaja respecto de otros de la lista de proveedores existentes.
Es aquí cuando el conocimiento, como activo intangible, ejerce su influencia y se transforma en el distintivo para lograr la ventaja competitiva y la eficiencia.
Pero hablamos de un conocimiento máximo, aquel que no solo dan los libros y los estudios universitarios, sino el que se logra por la experiencia del trabajo constante en el sector, de reunir experiencias de los clientes y utilizarlas como herramientas que ayuden a seguir optimizando la calidad.
Así, es simple deducir que la aplicación del conocimiento sobre un producto, su materia prima y su rendimiento, sumado a los años de experiencia son una ventaja diferencial que va más allá del simple objeto tangible.
Con estos elementos el proveedor, en este caso la empresa fabricante de contenedores plásticos como PLASTI-CONT, tiene la capacidad de asistir, de ser un guía, de poder ofrecer a su cliente un producto acorde a sus necesidades.
Editorial Plasti-Cont