Plástico contra la escasez de arena en el mundo

La arena cubre grandes extensiones de ríos, playas y desiertos en todo el mundo. Sin embargo, su extenso volumen corre peligro, ya que está siendo utilizada cada vez en cantidades más grandes como materia prima, principalmente en el área de la construcción y la fabricación.

Para hacernos una idea, sólo en el sector de la construcción, anualmente se utilizan cerca de 50.000 millones de toneladas de material en la producción de hormigón, el cual se compone aproximadamente por un 25% de arena.

El problema comienza en que el tipo de arena de los desiertos o playas no es el adecuado para usarlo como material de construcción: la arena del desierto es muy suave y la arena de playa debe ser usada en menores cantidades por su alto contenido de sal. Así, una gran proporción de la arena utilizada proviene de los lechos de ríos, cuya extracción causa graves problemas en el ecosistema, como la degradación del mismo asociada a la profundización del cauce, afectando también a la vegetación ribereña nativa y a la ocurrencia de posibles inundaciones o deslizamientos.

La excesiva utilización como materia prima ha sido un problema en países que atraviesan un auge en la construcción -como China, India o Singapur, entre otros-, lo que ha provocado que en los últimos años la escasez de este recurso.

Esto ha llevado a que en algunos países -como por ejemplo en India- exista un gran aumento de la extracción ilegal de este elemento, controlada por bandas criminales conocidas como las «mafias de la arena». Estos grupos se han relacionado con decenas de asesinatos también, como el del periodista de investigación Jagendra Singh el año 2015.

Según el profesor de ingeniería civil y ambiental Shobha Bhatia de la Universidad de Syracuse, «el dilema principal que desencadena esta grave problemática es la construcción». Estamos construyendo ciudades y pueblos a un ritmo sin precedentes, «pero muchos de nosotros tampoco nos damos cuenta de que la arena también se usa para cosas como teléfonos inteligentes, pantallas de televisión, paneles solares y otros artículos eléctricos», agrega.

¿Y qué podemos hacer para reducir este consumo desenfrenado?

Para tratar de reducir la necesidad de arena, un grupo de investigadores de la Universidad de Bath, en asociación con Goa Engineering College, se ha empeñado en demostrar que el residuo plástico puede reemplazar en parte a la arena en la construcción, ofreciendo una posible solución para la construcción sostenible, mientras se aborda la escasez de arena en ese país.

En India, se arrojan 15.000 toneladas de desechos plásticos cada día. La posibilidad de clasificarlos, limpiarlos y triturarlos, los ha convertido en una alternativa viable para su uso en el hormigón.

Respecto a este uso innovador del plástico, el Dr. John Orr, profesor de estructuras de hormigón en la Universidad de Cambridge perteneciente al grupo de investigación, comenta que: «descubrimos que se puede reemplazar hasta un 10% de la arena en el concreto por el plástico, teniendo la misma resistencia y la misma longevidad», y agrega: «eso de igual forma evita la necesidad de una gran cantidad de arena y ayudaría a reducir los desechos plásticos en las calles de la India».

Sin embargo, no debemos olvidar que la arena es solo un síntoma de un problema mayor. No es solo que estemos usando demasiada arena, sino que estamos usando demasiado de todo. Seguimos consumiendo todos los recursos del planeta a un ritmo que no puede continuar.

Entonces nuestro reto es seguir buscando soluciones que aborden el problema principal: el consumo excesivo de recursos naturales y lo que conlleva, un aceleramiento de los efectos del cambio climático. Si lo pensamos, todas estas disyuntivas están interconectadas, por lo que las posibles soluciones también deben estarlo.

Fuente: Tiempo.com